Roma ha echado a andar una exitosa campaña para promover el reciclaje de botellas de plástico, intercambiándolas por billetes de metro gratis, con lo que ha incentivado acciones responsables en cientos de viajeros. La campaña, en vigencia desde julio del año pasado, hasta ahora ha logrado el reciclaje de 350.000 botellas.
La iniciativa ha sido bien recibida por los residentes en la capital italiana, una ciudad con un problema crónico en cuanto a la recolección de su basura y con fórmulas de reciclaje ineficientes.
ATAC, compañía de transporte público italiana, extendió la campaña a toda la red de metro de la ciudad de Roma, colocando máquinas destinadas al reciclaje de botellas de plástico en tres de sus estaciones del Metro más frecuentadas. Los usuarios reciclan, de media, entre 15 y 20 botellas de una vez. Además, algunos viajeros han recolectado hasta 3.500 botellas en menos de 20 días, lo que se traduce en 175 billetes de metro gratis.
“Si usas dinero para involucrar a la gente (en el reciclaje) incluso aquellos que no tienen un sentido cívico van a reciclar” ha señalado a Reuters el residente en la capital italiana Claudio Perelli.
Para llevar un control minucioso de las cifras, los usuarios tienen acceso a una ‘app’ para dispositivos móviles que registra el número de billetes que han ganado según el número de botellas de plástico introducidas en las máquinas de reciclaje.
Un billete válido por 100 minutos de viaje cuesta 30 botellas de plástico, que tienen que insertarse en la máquina con la etiqueta del código de barras que las máquinas leen y registran en la ‘app’.
Por otro lado, los tornos del Metro pueden leer directamente los datos de la ‘app’, lo que permite que los participantes en la iniciativa no tengan que comprar un billete en papel. Y todo este proceso representa el procesamiento de miles de botellas de plástico que ya no se acumularán en las calles de la ciudad.
Aunque Roma es la primera capital de la Unión Europea en lanzar este esquema de reciclaje de botellas de plástico en las estaciones de metro, ciudades como Pekín o Estambul están adoptando iniciativas parecidas para replicar el éxito.
Sin duda merece una ovación esta exitosa hazaña, por haber sido capaz de integrar la participación de más y más personas a la causa de cuidar de nuestro ambiente y promover un desarrollo sostenible.